Balance del año

Hagamos balance

Llegan las fechas del año más esperadas para muchos, sobre todo los más peques de la casa pero, ¿y para los adultos? Nos parece que diciembre es el mes ideal para pararse con calma a reflexionar sobre las cosas más importantes que han pasado durante el año y sobre las que se quieren cambiar de cara al año siguiente. Los días son cortos y pasan como una flecha mientras que las noches son largas y la oscuridad, el frío y la lluvia invitan a quedarse en casa más de lo habitual. A pensar, meditar, y observar (nos).

Mirar atrás es un ejercicio de madurez siempre que nos ayude a encarar el año de una manera positiva y a mejorar las cosas que queremos pulir de nuestra vida, porque ¡hay que ser felices! Es una actividad muy recomendable que nos sirve para liberar la carga que hayamos acumulado durante el año y poder empezar el nuevo año más ligeros de peso emocional, sobre todo. Recordar todo lo que hemos conseguido y felicitarnos por ello es otro ejercicio muy saludable y recomendado. Con el paso del tiempo tendemos a olvidar. Recuperar nuestros éxitos del año nos ayudará siempre a empezar el nuevo con más energía, con más vitalidad y ganas de comernos  el mundo y no solo los turrones y las gambas de Nochebuena.

Para hacer un balance del año más exhaustivo y sin olvidarte de nada, te proponemos diez preguntas como una herramienta de reflexión para ayudarte a valorar todo lo que te ha sucedido durante este 2019.

Te recomendamos dedicar un momento de reflexión a cada pregunta. Escribir las respuestas te ayudará mucho a ejercitar la reflexión. Puedes releerlas cuantas veces quieras y modificar las respuestas. ¿Estás list@?

• ¿Cuáles han sido los grandes hitos?
• ¿Qué cosas nuevas has probado durante este año?
• ¿Cuáles han sido tus momentos más entrañables y felices?
• ¿Cuáles han sido las situaciones más complicadas a las que te has enfrentado?
• ¿Qué has aprendido durante este año?
• ¿Cuál ha sido tu mayor éxito personal? ¿Y cuál tu mayor éxito profesional?
• ¿Cuál ha sido el mayor aprendizaje sobre ti mismo?
• ¿Qué harías de forma diferente o cambiarías?
• ¿A qué debes dar gracias por lo conseguido durante este año? ¿Y a quién?
• ¿Qué quieres mantener durante el próximo año? ¿Te gustaría cambiar algo?
• ¿Hay alguna pasión que te gustaría desarrollar más este año?
• ¿Qué actividades decides eliminar de tu calendario?

Toma este tiempo y estas respuestas como una manera de conectar contigo mismo  y empezar el año con una actitud positiva y de superación.  Se considera que un año es un como un ciclo que comprende un inicio y un fin, y aunque la vida no se termina cuando el reloj muestra la medianoche del treinta y uno de diciembre, sí es la clausura de un período de la vida que merece cierta reflexión. ¿O no lo compartes?

¡Para!

Parar nos ayuda a observar. Esta actividad es una buena estrategia para auto reconocer las fortalezas, lo que servirá para afianzar la autoestima y la seguridad en las propias capacidades. Además, sirve para abonar el terreno que está por venir, y una vez más, aprender de los errores, que deberán traducirse en oportunidades de mejora. Este es un ejercicio que aporta sobre todo claridad mental y al mismo tiempo permite medir el desempeño personal -por ejemplo la constancia y el compromiso- para así buscar el mejoramiento continuo que implica el desarrollo humano.

El balance personal es una forma de conectarse con uno mismo y por eso debe realizarse sin prisas, aunque cada quien marca su estilo, lo importante es no empezar un nuevo año sin haber hecho una pausa antes. Pausa significa espacio para pensar, tomar impulso y mejorar. Realizar un balance de fin de año es hacer un alto en el camino que puede resultar beneficioso. Mirar hacia atrás implica ver aquello que nos propusimos y logramos y aquello que deseamos pero no pudimos alcanzar. Este recuento es una oportunidad de crecer, independiente de que al final sea positivo o negativo, pues permite un aprendizaje.

¿Es todo malo?

Existe la tendencia a recordar solo lo malo, aquello que no pudimos lograr y que nos causa frustración. Sin embargo, la satisfacción en la vida no depende sólo de los éxitos, sino de aprender a disfrutar de las cosas sencillas, de aquello que logramos y de lo que tenemos hoy. Cada momento difícil que afrontamos trae consigo una oportunidad en la vida, una madurez distinta, mayor empatía y cercanía con los demás. Hacer planes a futuro puede ser altamente motivante para las personas, pues se convierten en una guía a seguir. A la larga servirán para evaluar qué metas logramos alcanzar y aceptar aquello que podemos o no cambiar. Expresar en público algunas de nuestras metas ayudará a generar un grado de compromiso con lo que decimos. Lo importante es evitar las frustraciones por aquello que queríamos y no alcanzamos a realizar durante el año.

Clásicos propósitos

La lista es siempre interminable y estos son solo algunos ejemplos que te sonarán por repetidos (ya sean por ti, por tus amigas o tus primos y familiares).

1. Perder peso. Adelgazar siempre está en la lista y muy alto. ¿A quién le sobran unos kilos?, ¿a ti también? Este deseo está viene asociado a sus inseparables amigos: apuntarse al gimnasio, comer menos, no usar el ascensor y subir las escaleras andando y un eterno etcétera.
2. Dejar de fumar. Es otro que nunca falla. Siempre que nos proponemos hacer algo que nos cuesta un gran esfuerzo, escogemos fechas redondas, y el 1 de enero es una de las más socorridas. Los beneficios son muchos: se limpian los pulmones, se recupera olfato y sabor y se ahorra dinero, por solo mencionar unos pocos. Dicen que superados los primeros tres meses, la cuesta ya no se hace tan difícil. Al cabo del año lo habrás conseguido y casi no te lo podrás creer. ¿Soltamos el cigarro?
3. Conseguir un trabajo mejor. Ya sea porque aspiras a estar mejor pagada o porque quieres tener más tiempo para ti y los tuyos. Cambiar de trabajo es una aspiración muy saludable y a la que no hay que renunciar por muy mal que esté el mercado laboral. Si odias tu trabajo te lo recomendamos, ¡vence tus miedos y a por ello!
4. Ahorrar dinero. Es otro deseo difícil de cumplir, pero a todo el mundo le gustaría tener el balance financiero del año en positivo. No importa la manera, lo que interesa es que a final de año tengas una pequeña hucha para poder cumplir tus sueños. ¿Los tienes?
5. Encontrar el amor de verdad verdadera. Hay mucha gente que está sin pareja y le gustaría cambiar su situación o peor, gente atrapada en una relación que no funciona. Las fórmulas para conseguirlo son variadas, desde apuntarse a una web de citas, hasta empezar a hacer actividades de voluntariado o a deportes nuevos. ¡Si es tu opción a por ello!