Carta a los Reyes Magos

¿Todavía no has escrito tu lista de juguetes para Reyes Magos? No te preocupes, los Reyes Magos te conocen y saben lo que quieres, no obstante, todavía estas a tiempo de facilitarselo.

En realidad todo acaba de empezar, ¿verdad? Una vez brindamos por las fiestas de fin de año y empieza el Año Nuevo, todavía nos queda el día más importante para todos nuestros niños y niñas. Cada 6 de enero se celebra el Día de los Reyes Magos, una tradición que celebramos con mucha magia, la que los peques nos transmiten.

Un poquito de historia.

La tradición cuenta que los Reyes Magos fueron los encargados de ir al portal de Belén siguiendo una estrella que les indicaba el camino para ver al Niño Jesús que acababa de nacer. Al llegar, estos tres magos le ofrecieron al pequeño Jesús tres regalos: oro, incienso y mirra. Cada año, cuando se acerca la Navidad, todos los niños empiezan a escribir sus cartas a los reyes: Melchor, Gaspar y Baltasar. ¿Ya las habéis enviado o entregado al paje real?

En estas cartas, los niños le cuentan a los Reyes lo bien que se han portado durante todo el año anterior y les piden los regalos que les gustaría tener el 6 de enero. Se supone que, cuanto mejor se haya portado el niño durante el año, mejor será el regalo que reciba esa mañana. Pero todos los niños saben que, si se han portado muy mal, corren el riesgo de recibir un trozo de carbón dulce.

Los Tres Reyes Magos viajan en camello cada año desde Oriente para visitar a todos los niños. Cuando llegan a España van recorriendo cada uno de los pueblos, en las cabalgatas, para poder escuchar las peticiones de los niños y recibir sus cartas. En la noche del 5 de enero, después de haber visto la Cabalgata de Reyes de la ciudad, los niños se van corriendo a sus casas para poder preparar un poco de agua y leche con galletas o turrón para que se repongan del largo viaje y puedan proseguir su camino.

La mañana del 6 de enero, Día de Reyes, los niños se levantan nerviosos más temprano de lo habitual. Van corriendo al lugar en el que dejaron la comida y bebida y descubrir qué regalo les han hecho Sus Majestades los Reyes Magos de Oriente. Además, todos descubren con alegría que ya no queda agua y que el turrón se lo han comido, signo de que los reyes han recobrado bien sus fuerzas para volver a casa.

Ver los regalos allí colocados es mágico, seguro que todos y todas lo podéis recordar con claridad, ¡nos han traído justo lo que queríamos o algo incluso mejor! Si todavía os falta alguna idea tenemos un buen número de ellas, ¿empezamos?

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Más sobre los RRMM y su roscón

Pero, ¿cómo nacieron los Reyes Magos?, ¿por qué son tres? La respuesta se encuentra en la larga tradición medieval de la que da buena cuenta el archivo de la Biblioteca Nacional de España. El Evangelio de San Mateo sí que menciona a los Reyes Magos aunque se habla solo de unos «magos» que llegan de Oriente a Jerusalén buscando al rey de los judíos, cuyo nacimiento les ha sido revelado por una estrella. Herodes el Grande, gobernante de Palestina, les convoca a su palacio. Les interroga y les hace prometer que regresarán cuando hayan encontrado al Niño para que él también vaya a adorarlo. Después, llegan hasta el lugar donde se para la estrella y descubren al Niño con María y se postran ante él para ofrecerle oro, incienso y mirra. Advertidos en sueños de no volver ante Herodes, toman tierra por otro camino.

Tampoco se conoce a ciencia cierta cómo eran o cómo se llamaban. En el siglo XIV, el monje benedictino Beda, doctor de la iglesia, describió a los Reyes Magos en un manuscrito: ‘Melchor, anciano de blancos cabellos y larga barba del mismo color; Gaspar, más joven y rubio; y Baltasar, un señor negro’. De esta manera, Beda los identificó como representantes de Europa, Asia y África. En cuanto al número de Reyes Magos, se acepta el de tres, Melchor, Gaspar y Baltasar, aunque en distintos lugares se supone que fueron dos, cuatro, y hasta doce, como en Armenia. Del mismo modo, es incierto su destino después del encuentro con la familia de Jesús en Belén. Otro enigma es la estrella que les condujo hasta el pesebre del Niño. Para muchos científicos no se trataba más que de un cometa o meteoro luminoso.

Y después de la noche mágica, nada mejor que despertar con un dulce sabor en la boca. Mientras los turrones son los protagonistas de los postres navideños, el Roscón de Reyes es el protagonista de la mesa el día 6 de enero. El roscón es un bollo de masa fina con forma de anillo, más o menos redondo, decorado con trozos de frutas confitadas de muchos colores. Y desde el último tercio del siglo XX suele añadirse nata, crema, chocolate, trufa o cabello de ángel en su interior.

¿Cuál es vuestro preferido? Este dulce típico del 6 de enero esconde dentro de la masa una pequeña sorpresa. Hace muchos años el que encontrara la sorpresa se convertía en el rey de la reunión. Sin embargo, actualmente quien se tope con el haba seca tendrá que pagar el roscón el año siguiente, así que en realidad es una pifia que te toque. Lo que está claro es que la ilusión y la magia de los Reyes Magos de oriente se repiten año tras año. ¡Gracias por seguir formando parte de ella!

El día es hoy, ¡aprovechémoslo con ellos, nuestra mejor compañía!